¨El mal incurable de querer saber. Todo, todo, todo lo quiero saber. Para empezar quiero saber el chino antiguo, el de la dinastía Ming, que destronaron los Manchúes. Quiero saber la lengua de Islandia en que anónimos poetas escribieron los "Eddas". Las rutas de tierra del cazador prehistórico y las rutas del mar de Odiseo. El ciclo de la glucosa, los orbitales del átomo, el funcionamiento del magnetrón.Las amantes de Don Juan y los amantes de Verlaine. Y no sólo me obsesiona el pasado: me obsesiona el futuro, me obsesiona el condicional. ¿Dónde estaremos en el año tres mil?. ¿Y qué había podido pensar Cervantes de los hermanos Karamazov desde su limitado horizonte español?. Quiero guardar en la memoria la ecuación de Kepler, el Tolkappiyam, la canción del alba de los minnesinger y el dulce canto de amor de los troveros.¨
lunes, 17 de febrero de 2014
jueves, 13 de febrero de 2014
domingo, 9 de febrero de 2014
sábado, 8 de febrero de 2014
Soliloquios
El tedio cotidiano,
El ocio: paraíso y tortura.
Los minutos machacados uno a uno
Las citas que no se cumplen, las promesas que no llegan
Atardeceres que se ocultan, lunas que se escapan.
El amor que no existe, que huye y se disuelve en gotitas de sudor.
Tu recuerdo que no sana, no cicatriza
Cuerpos náufragos, astillas en altamar
El ocio: paraíso y tortura.
Los minutos machacados uno a uno
Las citas que no se cumplen, las promesas que no llegan
Atardeceres que se ocultan, lunas que se escapan.
El amor que no existe, que huye y se disuelve en gotitas de sudor.
Tu recuerdo que no sana, no cicatriza
Cuerpos náufragos, astillas en altamar
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