En Ecuador finalmente, junto a la ventanilla de un bus con destino Otavalo. "Choclito con queso, picadita,aguitas,colitas, choclo" dicen los vendedores ambulantes que se suben al bus cada dos cuadras. Hace un sol, muy picante y estoy muy contenta, hasta ahora la travesía ha sido de ensueño.Hoy el hitchhiking no fué posible en toda la ruta, pero no importa, todos los días no pueden ser del mismo color. Me aburre el monocromatismo!. En los tres controles policiales que hay después de la frontera hemos sido protagonistas de la gastada historia colombiana: siempre se nos ve como sospechosos de traficar droga. El policia se sube, nos pregunta vida y obra, nos revisa las mochilas, y continuamos. Después de cada requisa quedamos con una molesta sensación, no es una bonita bienvenida, pero todo hace parte de la experiencia.
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Escribo ahora desde la casa de Juan Alex, en Otavalo, después de darme un baño y sorprenderme con la amabilidad de nuestro anfitrión. Hoy será noche de fiesta en el Jala,Jala.
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Escribo ahora desde la casa de Juan Alex, en Otavalo, después de darme un baño y sorprenderme con la amabilidad de nuestro anfitrión. Hoy será noche de fiesta en el Jala,Jala.
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Día siguiente
Que buena fiesta! me duele mucho la cabeza, debió ser la guayuza :). Tomé Pilsener (la cerveza nacional) hasta el cansancio y bailé ritmos totalmente nuevos para mi: la cumbia villera, y música andina pero con toques electrónicos. El show de la noche estuvo a cargo de un grupo vallenato colombiano, y entonces supe cuanta familiaridad hay entre nuestros paises. Todos coreaban a grito herido los vallenatos clásicos. Los ecuatorianos saben moverse, pero son un poquito acelerados: todas las canciones se escuchan en versión remix. El Jala,Jala estaba repleto de gente a eso de las 11 pm, la mayoría eran jovencitos indígenas ,pero vestidos al estilo Daddy Yankee. La Gasolina al parecer caló en lo más profundo de su cultura, y los indígenas ya no quieren ponerse alpargates sino un bling,bling bien grandote. Es un fenómeno lamentable ,en mi punto de vista, pero totalmente natural en este mundo globalizado y donde se pregona a los cuatro vientos que "lo de afuera es mejor".¡ Ni siquiera quieren hablar en quechua! ¡Que triste!.
Sí, sí, nos perdimos la feria artesanal, pero tuvimos una rumba muy muy buena. Conocimos gente muy bacana y empiezan a cambiar nuestras impresiones respecto a nuestro país hermanito.
1 comentario:
Solo un primer comentario mi querida Parce:
Es una ofensa que la cumbia villera lleve el nombre de un ritmo tan famoso de su tierra.
Es una ofensa que Ud. haya bailado cumbia villera.
Es una ofensa que la cumbia villera la haya hecho bailar a Ud.
Es una ofensa para su persona que yo le haya presentado a la cumbia villera, sea al menos en canción.
Es una ofensa para la cumbia villera que yo la haya bailado.
Es una ofensa que Ud. no tenga en sus planes volverla a bailar. ¿Me llama cuando lo haga? :$
Le dejo un regalo de mi tierra y será lo proximo que danzará la representante argentina en la Fiesta del Café:
Lauraaaaaaaaaa se te ve la tanga
Tu bailas de minifalda
que risa que te da
por que se te ve la tanga
y no puedes esperar
que te lleven de la mano
que te inviten a un hotel
no lo haces por dinero
solo lo haces por placer
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